miércoles, 23 de abril de 2008

Olivia Jules and the overactive imagination

Hubo una época en la que me irritaba mucho el calificativo de chick lit (literatura para chicas), hasta que un día, investigando un poco, me di cuenta de que ya había leído a algunas de las escritoras y títulos incluídos en esta rúbrica, sin saber cómo estaban categorizados, y que de hecho, considerándolas sin el prejuicio de la etiqueta, algunas escriben muy bien (otro día hablaré de algunos de estos libros). Así que me asumo como treintañera y os explico lo de Olivia.


Helen Fielding, autora del "Diario de Bridget Jones", libro que critiqué sin haberlo leído (costumbre nada recomendable) y que ahora aprecio como a una vieja amiga, ha escrito también "Olivia Jules and the overactive imagination", una parodia de las novelas de Ian Fleming con James Bond como protagonista, inspirada por el 11 de septiembre en Nueva York y la psicosis del terrorismo nacida en esa fecha.


El libro no es tan bueno como los diarios de Bridget, pero Olivia tiene una serie de normas vitales que me parecieron dignas de ser transmitidas. Dedicado a todas (lo siento chicos, esto es bastante femenino, aunque creo que también os podéis aplicar algunas de ellas) las que ya no tienen madre o abuela, y necesitan un poco de sentido común tópico y en dosis de bolsillo.

"Rules for living by Olivia Jules :

1. Never panic. Stop, breathe, think.

2. No one is thinking about you. They’re thinking about themselves, just like you.

3. Never change haircut or color before an important event.

4. Nothing is either as bad or as good as it seems.

5. Do as you would be done by, e.g., thou shalt not kill.

6. It is better to buy one expensive thing that you really like than several cheap ones that you only quite like.

7. Hardly anything matters : if you get upset, ask yourself, « Does it really matter? »

8. The key to success lies in how you pick yourself up from failure.

9. Be honest and kind.

10. Only buy clothes that make you feel like doing a small dance.

11. Trust your instincts, not your overactive imagination.

12. When overwhelmed by disaster, check if it’s really a disaster by doing the following :

(a) look on the bright side and, if that doesn’t work, look on the funny side.
(b) think, « Oh, fuck it ».


13. If neither of the above works than maybe it is a disaster so turn to items 1 and 4.

14. Don’t expect the world to be safe or life to be fair.

15. Sometimes you just have to go with the flow.

16. Don’t regret anything. Remember there wasn’t anything else that could have happened, given who you were and the state of the world at that moment. The only thing you can change is the present, so learn from the past.

17. If you start regretting something and thinking, « I should have done… » always add, « but then I might have been run over by a lorry or blown up by a Japanese-manned torpedo. »
"



Vamos, que la que ha escrito "El secreto" (uf) no ha hecho mucho más que yo en este post y está ganando dinero a paladas. Creo que tengo futuro.

10 comentarios:

sumire dijo...

Una vez mas se pone de manifiesto que mi enorme lado masculino .

No me suelo sentir identificada con el tipo de mujer que se retrata en estos libros y por lo tanto la mayoria de los consejos no me sirven pa casi na.

Habitualmente no panico (ya se que eso no existe en castellano) ni compro compulsivamente, ni me importa en exceso como llevo el pelo (uñas, maquillaje etc..) si esta limpio y mas o menos bajo control, esta ok.

No hay mas desastres que los naturales, todo lo demás se puede solucionar antes o después y lo único que suelo lamentar es haberme comido esa palmera de chocolate y nata después de merendar.
Claro, ya hemos dicho que soy un caso particular (vamos particulariiiisimo)

En fin que puede que a alguna chica todavia le venga bien, tal y como estan de pavas las jovencitas por aqui no me extrañaria ni un pelo, pero en general tiene un toque un poco anticuado.

Arantza dijo...

Aah, querida Sumire: sólo te haré una pregunta ¿qué libros has leído que se puedan calificar de "chick lit"? Porque aparte de Bridget Jones, que es una insegura y una acomplejada -por algo es una caricatura de ese lado inseguro que tenemos TODOS y no sólo todas-, te aseguro que no todos proponen un modelo de Barbie incompetente e incapaz que debe ser salvada por un hombre. (Aunque en el caso de Bridget, es una caricatura del clásico de Jane Austen "Orgullo y prejuicio", así que una buena parte de las intrigas se deben a que respeta la línea argumental de esa novela). Entre los que he leído -no todos buenos-, la mayoría le busca el lado humorístico a las dificultades que puede tener la mujer en la treintena para llevar todo lo que se espera de ella : la libertad, la carrera profesional, encontrar una pareja que la trate con dignidad e igualdad y la absurdez del rol femenino que hace que, aunque una sea primera ministra, la van a juzgar por su aspecto, peso, edad. Son cosas con las que se identifican tantas mujeres que por eso tienen éxito.
Te juro que no he conocido ni una mujer liberada, inteligente, madura, que no se preocupe un mínimo, por ejemplo, por su peso. Es como la bola y el grillete que arrastramos todavía. Espero, como feminista, que llegue un día en el que seamos valoradas sólo en lo tocante a nuestras capacidades y competencia, sin tener además que ser delgadas, monas y bien vestidas. Pero mientras ese momento llega, podemos reírnos de la situación actual.
Y te aconsejo que leas "Miedo a volar", de Erica Jong, un clásico de la novela feminista. Verás cómo, tristemente, esas dificultades de las mujeres de los 70 para llevar su nueva libertad existen todavía, y que la protagonista dista mucho de preocuparse de su peinado en todo momento.:-)

Arantza dijo...

Y para las otras lectoras... recordad que no hay que tomarse todo lo que léeis aquí en primer grado :-)

sumire dijo...

No es un asunto exactamente de peinado, es un asunto de actitud.

Si seguimos vendiendo cierto tipo de estereotipos (si, nosotras mismas) seguiremos padeciendolos.

Aparte de eso, ya se que el mundo es injusto y que los hombres nos oprimen (me vas a pegar por ese comentario, ya lo se)
pero alguien me puede explicar por que tenemos que hacer todo lo que se espera de nosotras?

Esa es la trampa querer ser lo que "alguien" espera de nosotras.
Mientras caigamos en ella, lo de la mujer liberada es una milonga, y de las gordas.

Y sigo diciendo que la culpa, la tenemos principalmente nosotras que somos las primeras que no valoramos muchas veces a nuestras colegas por su competencia.

No comentamos del director general del BBVA si ha echado tripita o si la corbata no le hacia juego con la camisa pero si lo hacemos contra nuestras colegas.

No necesito leer a Erika Jong para saber que queda mucho por hacer, recuerda que vivo en un pais en el que cobro un 19% menos que un hombre solo por mi sexo.

Por cierto, recuerda que esta es un sano debate entre amigas y que yo voy en son de paz. :p

Arantza dijo...

Sumire: leyendo tu segundo comentario y releyendo mi respuesta al primero que has hecho... pues que básicamente estamos de acuerdo, reina mora. Lo que pasa es que yo me he hecho tanta mala sangre con el tema (sobre todo, cuando vivía por esos lares), que ahora que lo veo con un poco de distancia -porque aquí, aunque no sea perfecta, la situación de la mujer es muuuucho mejor- pues prefiero reírme a llorar. "Look on the bright side, if there isn't one, look on the funny side". Aunque también puedes optar por "oh, well, fuck it" ;-)

Arantza dijo...

... y tienes plenamente razón en que las mujeres son las primeras en perpetuar el machismo. Para muestra, un botón: esa generación de "príncipes" que no hacen nada en casa, criados por mamás trabajadoras, supuestamente emancipadas, y como comenté en el blog de Vega, no habría hombres que no den palo al agua en casa si no hubiera mujeres que lo toleran.

Lía dijo...

mmm...interesante debate, habéis leído el libro de Fátema Mernissi "El harén en occidente"?
Coincido plenamente en que todavía queda mucho, pero mucho por hacer y aunque creo que hay que llevarlo cuando menos con optimismo reconozco que no siempre es fácil, por lo menos para mí no lo es.
Y hablando de literatura he de reconocer que no he podido leer el Diario de Brigedt Jones a pesar de haberlo intentado unas 3 ó 4 veces, no puedo, me supera...lo cual no quiere decir que no haya leído novelas "chick lit", es como ver comedias románticas, tienen su momento.

Arantza dijo...

Eeeso mismo, Lía. Todo tiene su momento, efectivamente, como el maquillaje no es un pecado anti-feminista por sí mismo (si es que hay mucho feminismo mal comprendido que pulula por ahí), pero si una no puede ni salir a sacr la basura sin maquillarse porque de lo contrario, se siente la mitad de un ser humano.. pues hay un problema. El feminismo, depilado, es posible. :-) Siempre que haya la opción de no hacerlo si no nos sale del arco del triunfo, vaya.

Lía dijo...

jeje...yo tuve una compañera de piso que se maquillaba hasta para salir a tirar la basura como tu dices, aunque por lo menos no decía que era feminista.
Coincido plenamente en que hay mucho pseudofeminismo por ahí suelto y que dá pie a bastantes confusiones...pero hay que perseverar siempre ;)
Y si, el femnismo para mi es una cuestión de tener opciones tan fácil y tan difícil como eso.

Arantza dijo...

Amén, hermana. ;-)